El piojo adulto es de color blanco grisáceo y se torna rojizo al succionar sangre. La hembra, algo mayor que el macho, mide entre 3 y 4 mm. La boca posee estiletes adaptados para la succión y seis pares de ganchos con los que se prenden a la piel al alimentarse. Succionan sangre alrededor de cinco veces al día. La mordida del piojo no lastima, es una sustancia presente en su saliva –la que evita que la sangre se coagule mientras succiona- lo que produce picazón y otras reacciones, como eccema o alergia, e incluso fiebre con agrandamiento ganglionar. La vida del piojo puede alcanzar los 40 días, y en ese período la hembra pone hasta 200 huevos, de los cuales el 90% alcanza el estadio adulto. Estos huevos, las liendres, son de color blanco nacarado y se adhieren al pelo mediante una sustancia cementante, la quitina. Suelen ubicarse en la base del cabello, principalmente detrás de las orejas y en la nuca. Las larvas nacen a los siete días, y entre dos y tres semanas después, ya son piojos adultos que reinician el ciclo.
El piojo es capaz de sobrevivir unas 20 horas fuera del cuero cabelludo, ya sea en peines, hebillas, ropa, sábanas, areneros, incluso en el agua. En condiciones de alta temperatura y humedad, ese lapso puede extenderse hasta las 48 horas.
El diagnóstico es uno de los aspectos más importantes a fin de evitar las epidemias. Es importante la revisación permanente en busca de piojos o liendres, tanto de los niños como de toda la familia, especialmente ante signos de picazón o irritación en las zonas arriba mencionadas.
La prevención y el tratamiento también debe incluir al grupo familiar y a otros contactos de la persona infestada. Además del uso de productos especiales, se debe:
· Esterilizar o lavar con agua muy caliente peines, cepillos, hebillas, ropa, sábanas y toallas (los piojos mueren a los 50° grados C), evitar compartirlos estos elementos.
· Usar el pelo corto o recogido.
· Pasar diariamente el peine fino embebido en vinagre, para facilitar el desprendimiento de las liendres, y luego desinfectar el mismo.
Debemos tener en cuenta que este tratamiento debe durar entre siete y diez días seguidos como mínimo y que, a la hora de elegir un producto pediculicida, éstos pueden contener en su fórmula principios activos irritantes, alérgicos o causantes, en casos extremos, de dermatitis en caso de uso diario, lo que dificulta su aplicación continua. En función del ciclo vital del piojo y de la facilidad con que se contagia esta ectoparasitosis, contar con un producto que pueda utilizarse diariamente sin riesgos de toxicidad podría acercarse al ideal.
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· Pasar diariamente el peine fino embebido en vinagre, para facilitar el desprendimiento de las liendres, y luego desinfectar el mismo.
Debemos tener en cuenta que este tratamiento debe durar entre siete y diez días seguidos como mínimo y que, a la hora de elegir un producto pediculicida, éstos pueden contener en su fórmula principios activos irritantes, alérgicos o causantes, en casos extremos, de dermatitis en caso de uso diario, lo que dificulta su aplicación continua. En función del ciclo vital del piojo y de la facilidad con que se contagia esta ectoparasitosis, contar con un producto que pueda utilizarse diariamente sin riesgos de toxicidad podría acercarse al ideal.
El Shampoo y la Loción de REINO son productos atóxicos, con ingredientes naturales como el Oleato de Cobre, el Romero, la Cuasia Amara y Propóleos, que no dañan el cabello, no irritan la piel ni los ojos.
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